
Hoy empiezo mi semana de adaptación. Comenzaré por la modalidad que creo más sencilla de llevar. En este estilo tengo que dormir durante 6 horas y hacer 1 siesta de 20 minutos... esto quiere decir que cuando termine de escribir este artículo dormiré mis veinte minutitos.
En este artículo les comentaré como es la fase de adaptación al sueño polifásico, en realidad les contaré lo que he leído y me han contado porque por el momento no puedo hablar desde mi experiencia personal, eso vendrá en unos días.
Adaptación al sueño polifásico
1.- Decidir
Lo primero es decidir cuál es la mejor planificación para nosotros. A cuál nos queremos adaptar. Esta debe ser una planificación correcta para nosotros y nuestro estilo de vida. Así conseguiremos ahorrarnos la agonía de una adaptación sin éxito.
Norma
Si tenemos que personalizar fuertemente
una planificación para que nos trabaje, entonces no es bueno empezar la
adaptación al sueño polifásico.
Lo mejor es elegir una planificación polifásica conocida para probarla y debemos hacer las menos
personalizaciones posibles.
No debemos esquivar los
detalles porque
algo nos suene mejor o simplemente pensemos que sea más probable que funcione.
2.- Planificación
Una
vez elegida nuestra planificación, anotaremos nuestro plan de sueño, incluyendo las actividades que desarrollaremos en nuestro tiempo libre.
Es necesario que todo
lo que tenga que ver con el sueño debe ocurrir al mismo tiempo cada día. Si tuviéramos que que mover permanentemente una siesta más allá de lo que se debería (por ejemplo, una
hora más tarde los martes), entonces debemos saber que nos sentiremos cansados durante un tiempo en ese periodo de variación. Tendremos que planearlo convenientemente.
Tener
una planificación desigual puede hacer nuestro periodo de adaptación ligeramente más
largo y duro. Pero si nos fijamos con fuerza a una planificación de siesta desigual,
eventualmente, nos acostumbraremos a las irregularidades.
3.- La gran lista
Es importante tener claro en que vamos a emplear todo el tiempo que tendremos libre. No debemos quedarnos mirando al techo y no saber en que emplearlo porque de lo contrario nuestra adaptación se irá a pique.
Por esta razón, es mega-importante realizar
una lista monstruosa con todas las actividades que creamos poder realizar con nuestro tiempo extra durante la adaptación.
Las actividades a realizar por la noche deben suponer tranquilidad, no necesitar mucha luz, que no requieran mucho pensamiento intrincado o coordinación y actividades que mantengan nuestro cuerpo en movimiento para no quedarnos dormidos.
Si queremos ir por delante en la curva de adaptación, debemos trata de llegar a
hacer las actividades que planeemos hacer cada noche. De esta manera podremos configurar estos hábitos
pronto.
4.- Alarmas de back up
Son
absolutamente necesarias. Cinco mejor que seis. Mantengamos en mente que nuestro objetivo
es levantarnos en punto, no media hora más tarde después de haber sonado 6
alarmas distintas.
Estamos entrenando nuestro cerebro y en este camino, la consistencia y la precisión son indispensables. No
intentemos usar nuestras alarmas de back up. Un truco es colocar 5 alarmas de back up
por la casa a la vez, colocadas en diferentes zonas, de forma que tengamos que levantarnos para poder apagarlas. Podemos comprar varios relojes de cocina, al menos dos.
Si
tenemos un fallo de adaptación no podemos intentarlo
hasta dos o tres meses más tarde
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tus comentarios: Por favor se respetuoso.
Monica Frey Grimm
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.